Por: Dr. Alejandro Maciel Miranda.
El cáncer de mama es un problema de salud pública en nuestro país. Actualmente, es la principal causa de muerte de mujeres en edad productiva.
El tratamiento es multidisciplinario; parte indispensable del manejo consiste en la resección quirúrgica del tumor con la consecuente perdida parcial o total de la mama y su repercusión funcional y estética, es por ello que los Cirujanos Plásticos debemos integrarnos al equipo terapéutico.
En países desarrollados y latinoamericanos como Brasil y Argentina, está legislado que la reconstrucción mamaria debe ser cubierta por las Instituciones de Salud. México no debe quedarse atrás en esta tendencia mundial y los cirujanos plásticos debemos proponer y dirigir esta iniciativa para que la reconstrucción sea parte integral del tratamiento.
El Consenso Mexicano sobre Diagnóstico y Tratamiento del Cáncer de Mama, a través de la Norma Oficial Mexicana, recomienda que toda mujer que tenga que ser sometida a una mastectomía radical, sea informada sobre las opciones de reconstrucción mamaria.
Actualmente, los Cirujanos Plásticos mexicanos no estamos haciendo lo necesario para tomar nuestro lugar en esta parte del tratamiento del cáncer mamario. Hasta ahora, hemos demostrado apatía y falta de participación en ese sentido, a excepción de algunos que han dirigido proyectos personales.
Derivado de esa falta de participación como gremio, los Cirujanos Oncólogos se han visto en la posibilidad de realizar procedimientos reconstructivos en un área que ya de por sí manejan. El mismo Consenso Mexicano menciona que el Cirujano Oncólogo puede realizar procedimientos de “cirugía oncoplástica” cuando no se afecte más del 20% del volumen de la mama.
Si los Cirujanos Plásticos no hemos estado presentes en la reconstrucción de las mastectomías en las pacientes, no podremos reclamar tampoco nuestra participación en los procedimientos de reconstrucción parcial. Por eso, es necesario que nuestra Asociación Mexicana de Cirugía Plástica coordine acciones conjuntas para que nuestro gremio muestre presencia.
Estas acciones deberán ir encaminadas a evitar los micro esfuerzos macro desorganizados que hasta ahora se han hecho, y permitir integrar a todos los Cirujanos Plásticos en este movimiento.
Probablemente en coordinación de la AMCPER y la FUNCIPLAS, se puedan realizar las campañas de cirugías, siendo estas instituciones las que coordinen las actividades y la recaudación de fondos para este fin.
Además, esta labor nos permitirá realizar estudios multicéntricos y desarrollar nuestra evidencia para que podamos proponer la mejor técnica de reconstrucción de acuerdo a las realidades económicas y culturales de nuestro país; organizar cursos de entrenamiento y disponer de centros de referencia para cirugía de mayor especialización.
Una vez integrados como un gremio, podemos presentarnos ante la sociedad como la especialidad que se hará cargo de este tipo de cirugías y reclamar nuestro derecho de ser los especialistas que realicen la reconstrucción total o parcial de la mama después de cáncer.
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